Víctimas, 2 de abril: Bernardo Pérez Sobrino y Juan Fructuoso Gómez

Libertad Digital.




En torno a las cuatro de la tarde del 2 de abril de 1984, y mientras tomaba un café en el Bar Bautista del barrio bilbaíno de Uretamendi, un etarra disparó dos veces por la espalda a BERNARDO PÉREZ SOBRINO, policía nacional, hiriéndole mortalmente en la cabeza. Uno de los proyectiles alcanzó al dueño del establecimiento, Lisardo Landeta Olalde, que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital Civil de Basurto de una herida en el brazo.
El etarra entró en la tasca y, tras pedir una consumición, disparó contra Bernardo, que iba de paisano y se encontraba de espaldas al agresor. En el suelo se recogieron, posteriormente, dos casquillos de 9 milímetros parabellum y una bala sin percutir. En la puerta del bar otros dos terroristas esperaban al autor de los disparos en un Seat 133 de color blanco que habían robado 20 minutos antes a punta de pistola. El vehículo apareció, media hora después, en una céntrica avenida bilbaína.
Un familiar de la víctima declaró tras el atentado: "Yo sé que Bernardo no ha hecho nada de lo que se hubiera tenido que arrepentir. Sé que sus asesinos han ido sólo al uniforme".
En 1986 fue condenado a 29 años de prisión mayor, como autor material del asesinato de Bernardo, el etarra José Félix Zabarte Jainaga. Los dos cómplices que le ayudaron a cometer el atentado no han sido juzgados. Zabarte Jainaga, miembro del grupo Vizcaya de ETA, fue detenido en julio de 1985, junto a otros 17 miembros de la banda terrorista. Zabarte fue condenado a centenares de años de cárcel por su participación en varios asesinatos terroristas. La aplicación de la "doctrina Parot" impidió que saliese de prisión en marzo de 2008, estando prevista dicha salida para 2015. Si es así, habrá cumplido 30 años de cárcel.
Bernardo Pérez Sobrino era de Carrión de Calatrava (Ciudad Real), pero vivía en el País Vasco desde hacía más de diez años. Tres años antes de su asesinato había ingresado en el cuerpo de la Policía Nacional y estaba destinado en Bilbao. Tenía 27 años. Estaba casado con María del Carmen Medina González, también de 27 años, que sufrió un ataque de nervios al conocer la noticia del asesinato de su marido. Bernardo y María del Carmen tenían dos hijos.


El 2 de abril de 1987, en torno a las 22:00 horas, JUAN FRUCTUOSO GÓMEZ fue alcanzado de lleno por la explosión de un coche bomba en Barcelona. La deflagración fue brutal y su cuerpo se encontró a treinta metros del lugar de la explosión.

El vehículo cargado de explosivos estaba colocado en la confluencia de la avenida de la Meridiana con la avenida Vizcaya, y explotó al paso de una patrulla de la Guardia Civil. Juan había aparcado el coche e iba andando por la calle en dirección a casa de su hermano, Jesús, para dejarle una documentación y visitar a sus sobrinos. La explosión del coche-bomba se lo impidió.
La deflagración provocó el incendio de dos vehículos y afectó parcialmente a otros doce. También se vieron dañados edificios de los alrededores, provocando heridas leves a varios vecinos, consecuencia de la rotura de los cristales.
Además de la muerte en el acto de Juan, el coche bomba causó heridas a siete personas, entre ellas tres guardias civiles. Los tres guardias civiles heridos fueron Manuel Chica López, Juan García Estévez (de 31 años), y José Manuel Fernández Cubillo, que fue trasladado al Hospital Clínico con conmoción cerebral, heridas de metralla en la cara y en la pierna y mano derecha. Las heridas de Manuel no revestían gravedad. Sin embargo Juan García necesitó 310 días de asistencia médica. Por su parte, José Manuel Fernández Cubillo permaneció más de un año bajo cuidados médicos, y quedó ciego, además de sufrir otras graves secuelas.
También sufrieron heridas de menor gravedad los transeúntes Nicasio Pozo DávilaLuisa Valiño DávilaTomás Martín EspinosaManuel Cifuentes Trequeros y Patricia Martínez Vera.
Este atentado era el segundo que se producía en Barcelona por el método del coche bomba en el plazo de una semana. El viernes 27 de marzo una furgoneta-bomba había provocado la muerte del guardia civil Antonio González Herrera.
Días después del atentado ETA remitió un comunicado en la que lamentaba la muerte de un civil, pero advertía a la población, con su lenguaje bélico habitual, que tomara "precauciones en las inmediaciones de las instalaciones y de los miembros de las fuerzas de ocupación, susceptibles de ser en cualquier momento objetivos militares de nuestra organización". Juan fue el primer civil asesinado por ETA en Cataluña.
Por el asesinato de Juan fueron condenados en 1989 Domingo Troitiño Arranz y Josefa Mercedes Ernaga Esnoz. A ambos se les impuso una pena total de 168 años. En 2002 fue condenado a 95 años Rafael Caride Simón. Los tres formaban parte del grupo Barcelona de ETA. Domingo Troitiño, detenido en septiembre de 1987, fue el etarra que colocó el coche cargado de explosivos y líquido inflamable en el parking de Hipercor el 19 de junio de 1987, atentado que provocó veintiuna víctimas mortales. Su hermano Antonio Troitiño es también un sanguinario terrorista, autor, entre otros atentados, del asesinato de 12 guardias civiles en la madrileña plaza de República Dominicana el 14 de julio de 1986.
Juan Fructuoso Gómez tenía 27 años y estaba soltero. Era técnico industrial. Su hermano, el escultor Jesús Fructuoso, es el autor del monumento en memoria de las víctimas del terrorismo que se levantó en Tarrasa (Barcelona) en 2002. También es autor de la escultura en memoria de las víctimas del terrorismo que se hizo en Lérida en 2008.

Documento de Aplicación. Vivienda: Seguridad Estructural: Acero


CSCAE (Descargar en PDF). 


Incluyo esta obra entre mis documentos sobre Estructuras.





1 Generalidades 

1.1 Ámbito de aplicación

1 Esta sección del DA-V ofrece reglas acerca de la seguridad estructural de elementos realizados con acero en perfiles laminados o tubos de chapa laminados o conformados, simples o agrupados unidos por soldadura.

2 Las reglas particulares acerca de la prefabricación de sistemas completos, con montaje mecanizado mediante tornillos, o con dispositivos especiales como bulones o tensores, quedan fuera del alcance de este documento, que en esos casos puede usarse en lo relativo a las reglas generales de análisis y comprobación de secciones y piezas.

3 Salvo en lo establecido en 6.1, en cuanto a chapas grecazas, se excluyen las piezas de sección abierta con paredes delgadas, que pueden sufrir pandeo por torsión, las que se realicen con chapas de más de 40 mm de grueso, o con más de 35 mm de grueso sometidas a temperaturas inferiores a -10ºC, y las soluciones que necesiten inevitablemente piezas sometidas a torsión para conseguir el equilibrio.


El caso chino

Carlos Alberto Montaner.



El año pasado, el primer inversionista en Alemania no fue Estados Unidos, tampoco Suiza o Francia. Fue China. Y los chinos no invirtieron en materias primas, como suelen hacer en América Latina, sino en actividades industriales, tecnología e ingeniería.

Entre las compras que han hecho los chinos en Alemania se cuenta la compañía Putzmeister, fundada en 1958; un gigante dedicado a los equipos de construcción. La adquirió por miles de millones de dólares, precisamente en el 2011, una compañía china llamada Sany, creada en 1986 por tres socios que entonces reunieron un pequeño capital de unos 10.000 dólares al cambio actual.


El presidente de Sany es Lian Wengen, el hombre más rico de China. Algunos le calculan un capital de 11.000 millones de dólares. Como es tan rico y exitoso, el curioso Partido Comunista Chino le ha ofrecido un puesto en el Comité Central.


Adonde quiero llegar es a estas dos conclusiones:


1) El gran éxito chino no es el triunfo de un modelo económico especial, sino el resultado de liberar la inmensa capacidad creativa de la sociedad china en el terreno de la empresaria privada. El Estado chino dejó de ser un obstáculo para el desarrollo empresarial privado y se transformó en promotor del mismo. Continuó cercenando u obstruyendo las libertades individuales, pero dejó de entorpecer la creación de riqueza por parte de los ciudadanos.


2) En esencia, esto se parece a lo que sucede en Estados Unidos, en Suiza, en Holanda, en Israel, en cualquiera de los países exitosos: son ricos y desarrollados porque cuentan con un parque empresarial privado que genera riqueza y avances tecnológicos en medio de una intensa competencia económica.


Sencillamente, esa multiplicación de panes y peces no es posible hacerla desde el Estado y a cargo del Estado. El Gran Salto Adelante que Mao intentó infructuosamente se ha llevado finalmente a cabo, pero no con el recetario de Marx, sino con el de Adam Smith.


Los ejemplos de China, Japón, Taiwán, Corea del Sur, Alemania, Estados Unidos, de todas esas naciones que provocan admiración en el terreno económico, nos deben conducir a un razonamiento lógico: si entre los objetivos esenciales de una sociedad está el de crear riqueza y luchar contra la pobreza y el atraso, es absolutamente prioritario que su Estado segregue las condiciones para el desarrollo de un parque empresarial privado variado y complejo.


Es verdad que, en el camino, los empresarios más hábiles y dichosos se enriquecerán tremendamente, como el señor Lian Wengen, pero en su marcha impetuosa a la cima arrastrarán a millones de personas hacia formas superiores de vida.


Cuando comenzó el cambio económico en China, a mediados de los años setenta, un obrero industrial de ese país ganaba la decimosexta parte de lo que recibía un trabajador norteamericano en un puesto similar. Hoy, el primero gana una cuarta parte de lo que recibe el segundo. Puede que en el futuro incluso llegue a ganar lo mismo o más: los japoneses pueden dar fe de ello. Esos trescientos millones de personas que hoy forman parte de los niveles sociales medios de China deben su posición, en gran medida, a la furia empresarial privada desatada en dicho país.


Naturalmente, este impresionante milagro económico está y estará en peligro de saltar por los aires si China no consigue evolucionar en el terreno político hacia un sistema razonable de solucionar los conflictos y transmitir la autoridad basado en el consentimiento de los ciudadanos, como ha hecho, por ejemplo, Taiwán.


La paradoja consiste en que cada chino que consigue pasar del campo a la ciudad, del analfabetismo al conocimiento y de la pobreza a las clases medias es una persona socialmente inconforme que demandará cuotas crecientes de libertad y una inversión de las relaciones de poder con respecto al Estado. Cuando lo recibía todo del Estado, era su miserable sirviente. Ahora, cuando con su trabajo en el ámbito privado crea riquezas y mantiene al Estado, desea que los funcionarios se conviertan en servidores públicos. El que paga, manda.


Afortunadamente, el modelo de la democracia liberal, con todas sus imperfecciones, ha resuelto esas tensiones entre la sociedad y el Estado, y son cada vez más los chinos que miran a Occidente como una fuente de inspiración cívica. Es en esa atmósfera donde prospera el mejor capitalismo, y no en las dictaduras de partido único.

firmaspress.com

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The Atlantic.
























La brecha salarial de Género en España: Algunas aclaraciones

Sara de la Rica.



La Unión Europea celebra el 22 de Febrero el día de la “Igualdad Salarial de Género”. Un par de semanas más tarde, el 8 de Marzo, se ha celebrado el Día Internacional de la Mujer. En los dos días, pude leer en varios medios escritos noticias como “Las mujeres cobran el 22% menos que los hombres” [aquí] u otras, como “las mujeres cobran en promedio 18% menos que sus colegas de trabajo masculinos [aquí]. En muchas ocasiones, se identifica la “brecha salarial de género” precisamente con estas diferencias en retribuciones medias. Sin embargo, la definición de brecha salarial de género es “la diferencia de ingresos entre hombres y mujeres que realizan el mismo trabajo”. [aquí]. Creo que en general la información sobre la brecha salarial de género que se ofrece en los medios es, cuando menos, confusa. Por otra parte, la decisión de qué hombres y mujeres realizan el mismo trabajo tampoco está exenta de discusión. Dedicaré esta entrada a tratar de aportar información sobre este aspecto.
Para empezar, la fuente de datos de donde se obtiene la más completa información sobre salarios en España es la “Encuesta de Estructura Salarial (EES)”. Esta es una encuesta que el INE realiza cuatrienalmente – hasta el momento existen tres olas disponibles – 1995, 2002 y 2006, y a partir de ellas, el INE, extrapola anualmente las diferencias salariales de género en los años siguientes a la última encuesta disponible a la espera de la siguiente encuesta cuatrienal. [más información, aquí]. En base a estos datos (para 2006, que es el último año para los que disponemos de datos individualizados), podemos obtener la siguiente información sobre las diferencias salariales de género en nuestro país:
Considerando el salario bruto anual, la diferencia salarial media entre hombres y mujeres es del 30%, es decir, en media, las mujeres ganan anualmente un 30 por ciento menos de los hombres.
Sin embargo, la ganancia anual no es la mejor manera de medir las diferencias salariales de género, dado que normalmente las mujeres trabajan en media menos horas que los hombres. Por esto, el segundo dato interesante que la ESS aporta es:
Considerando el salario bruto por hora, la diferencia salarial media entre hombres y mujeres es del 25%, es decir, en media, las mujeres ganan por hora un 25% menos que los hombres (datos de 2006).
La ganancia por hora refleja mucho más adecuadamente el pago por unidad de tiempo, y dado que el número medio de horas trabajadas al año por las mujeres es menor al de los hombres, el AJUSTE por el número de horas en la medición de la diferencia salarial de género es absolutamente imprescindible.
Pero éste no es más que un primer ajuste si nuestra intención es tratar de medir la brecha salarial de género entre hombres y mujeres, es decir, la diferencia salarial hora entre hombres y mujeres que realizan el mismo trabajo. ¿Quiénes son los hombres y mujeres que realizan el mismo trabajo? Desde el punto de vista económico, entendemos que dos personas realizan el mismo trabajo si aportan (por unidad de tiempo) el mismo valor añadido a la empresa, y en consecuencia, si su productividad laboral es la misma o muy similar. Si ésta fuera observable, seleccionaríamos hombres y mujeres con la misma productividad laboral, compararíamos sus salarios hora y computaríamos así la brecha salarial de género. Pero por desgracia esta variable no la observamos y en consecuencia, su medición resulta complicada.
Para aproximar la productividad laboral es preciso tener en cuenta tanto condiciones por parte de la oferta (el trabajador, su capital humano), como por parte de la demanda (la empresa, su condición tecnológica). Por parte de la oferta, existen algunas variables observables, como el nivel educativo o la experiencia laboral (a veces aproximada por la edad, aunque ciertamente no son la misma cosa) , que de alguna manera reflejan (por supuesto con error) el capital humano de los trabajadores y sirven para ayudarnos a aproximar la productividad laboral. Es muy sencillo medir la diferencia salarial por hora trabajada entre hombres y mujeres con el mismo nivel educativo (primaria o menor, secundaria y universitaria) y la misma edad. Basta con estimar con una muestra de hombres y mujeres el salario hora (en logaritmos) sobre un indicador de mujer, incluyendo la variable edad y los indicadores de educación. El coeficiente que acompaña al indicador de mujer nos indica la diferencia salarial de género CONDICIONADA por el nivel educativo y la edad, o en otras palabras, el diferencial salarial (por hora trabajada) entre hombres y mujeres que tienen la misma edad y el mismo nivel educativo. Con la muestra de 2006, que es el último año para los que disponemos de los microdatos de la encuesta, este coeficiente asciende al 30%, es decir, entre hombres y mujeres con el mismo nivel educativo y la misma edad, las mujeres en media ganan un 30 por ciento menos que los hombres. Se observa que al condicionar por el nivel educativo y la edad las diferencias salariales entre hombres y mujeres no disminuyen, sino que aumentan – del 25 al 30%, lo cual se debe a que los niveles educativos de las mujeres trabajadoras en España en 2006 – en especial el porcentaje de universitarias, es claramente superior al de los hombres, lo que provoca este aumento en las diferencias salariales al condicionar éstas por el nivel educativo y la edad.
Pero no todos los hombres y mujeres que tienen la misma edad y el mismo nivel educativo realizan el mismo trabajo (o tienen una productividad laboral similar). De hecho, dependiendo del sector de actividad, la ocupación y la empresa en la que los trabajadores realicen su trabajo, su productividad laboral y en consecuencia, el valor añadido que aporten, será diferente. Por tanto, para acercarnos a la medición de la brecha salarial de género es conveniente comparar los salarios hora de hombres y mujeres con la misma edad y nivel educativo pero que además trabajan en la misma industria y/o en la misma ocupación. Hago en principio el ejercicio condicionando por la ocupación. Aquí la decisión sobre el número de ocupaciones que deben considerarse no es trivial. Si desagregamos en grupos ocupacionales amplios (managers, profesionales, técnicos, administrativos, vendedores, trabajadores manuales cualificados y trabajadores manuales no cualificados- 7 categorías), el control de la ocupación es muy imperfecto – podemos enfrentarnos a alta segregación de género incluso dentro de cada uno de los grandes grupos ocupacionales, mientras que si consideramos una desagregación muy precisa, podemos encontrarnos con que muchas de esas ocupaciones son o bien solamente masculinas o solamente femeninas y en consecuencia no es posible medir la diferencia salarial dentro de esas ocupaciones. Utilizo por tanto aquí una estrategia media, ni grupos muy amplios ni muy precisos (17 categorías ocupacionales). Al comparar el salario hora de hombres y mujeres con el mismo nivel educativo, misma edad y que trabajan en la misma ocupación, la brecha salarial es del 25%.
Sin embargo, sería muy deseable comparar hombres y mujeres que trabajan en la misma empresa, donde hombres y mujeres se enfrentan al mismo sector de actividad, al mismo tipo de negociación colectiva, similares relaciones laborales empresario/trabajador y al mismo tamaño de empresa, todos ellos aspectos que sin duda afectan a la productividad laboral pero que bien pueden diferir al comparar hombres y mujeres que simplemente trabajan en la misma ocupación. Con la Encuesta de Estructura Salarial de 2006 esto es posible, y al estimar la diferencia salarial entre hombres y mujeres de la misma edad, mismo nivel educativo y que trabajan en la misma empresa, ésta desciende al 18%.
Por último, también es posible comparar el salario hora de hombres y mujeres que trabajan no sólo en la misma empresa sino también en la misma ocupación. Recurriendo a la desagregación ocupacional de 17 categorías, la diferencia salarial de género entre hombres y mujeres que trabajan en la misma empresa y en la misma ocupación, y que además tienen la misma edad y el mismo nivel educativo desciende al 14%.
Si creemos que hombres y mujeres que trabajan en la misma empresa y la misma ocupación (17 categorías), tienen la misma edad y el mismo nivel educativo realizan el mismo trabajo, entonces la brecha salarial de género en nuestro país es del 14%, o en otras palabras, las mujeres ganan de media por hora trabajada un 14 por ciento menos que los hombres que realizan un trabajo similar – o que tienen una productividad laboral similar.
¿Es esta una afirmación contundente? No, pero se le acerca. Quedan por desgracia aspectos tanto de demanda como de oferta que afectan a la productividad laboral y que no han podido ser controlados. Uno, el ya mencionado de que la desagregación ocupacional que he realizado no es suficientemente precisa. Dos, que el tipo de educación, sobre todo a nivel universitario, que hombres y mujeres escogen es muy diferente, aunque en parte estas diferencias están subsanadas al controlar por la ocupación. En tercer lugar, que la experiencia laboral, aproximada por la edad, está medida con error, y este error afecta en general más a mujeres que a hombres. En consecuencia, aconsejaría cautela al interpretar el resultado.
En cualquier caso, sí creo que con este ejercicio nos hemos acercado MUCHO a la comparación entre hombres y mujeres con productividades laborales muy similares, y que por tanto, realizan un trabajo muy similar. El hecho de que la estimación de la brecha salarial de género sea del 14% nos hace pensar que las mujeres NO reciben el mismo pago por el mismo trabajo, y en consecuencia debemos alertar sobre la necesidad de avanzar hacia la igualdad de género en el mercado de trabajo.

Dejando las cosas claras

Álvaro de Marichalar.



Querida doña Pilar,
Con lo simpática que estuvo usted conmigo el día que la conocí, buena mujer... Qué feo lo que ha escrito usted sobre mí en La Vanguardia, qué feo. Pero bueno, vamos a ver si lo arreglamos un poco.
Ya supongo que estar a su nivel intelectual es tarea casi imposible, pero déjenos pensar un poco a los que no pensamos como usted, por favor. No intente anularnos de entrada. Encerrarnos en un sector. Darnos sentencia. Todo eso está hecho fatal. Y tampoco se sulfure tanto; ni se equivoque tanto; ni insulte tanto.
Ay Pilar, Pilar... Qué nombre más bonito, por cierto. Supongo que sabe lo que decimos en Catalunya, mira't a tu i no diràs mal de ningú! Resulta evidente que quien insulta anda mal de argumentos. Y la verdad es que en su brillante artículo hay de todo, menos argumentos. Pero yo voy a darle alguno ahora. Y además, con todo cariño, respeto, tranquilidad y consideración. 
Mire usted, trabajo muy duro desde los 20 años. Estudié administración de empresas en EE.UU., tras hacer el servicio militar como voluntario en el Ejército del Aire (aunque podría haberme librado al ser huérfano de artillero). En la universidad americana, trabajaba en la cafetería varias horas al día para ayudarme a pagar los estudios. Al regresar a España, monté la empresa TeleSat, pionera en la venta e instalación de antenas parabólicas. Me fue muy bien, aunque fueron años de trabajo intenso donde por las mañanas vendía antenas encorbatado y, por las tardes, las instalaba con mis empleados subidos por los tejados de Barcelona o Bilbao. Seis años más tarde monté otra empresa, esta vez de telefonía móvil (también pionera en España). Paralelamente, comencé a hacer negocios inmobiliarios (llevo 25 años en esta actividad) especializándome en atraer inversores europeos a comprar propiedades en España.  
Hace tres años fundé otra compañía, ésta dedicada a la compra de teléfonos móviles usados que luego arreglamos y revendemos en países emergentes. Conozco lo que significa vivir en la oficina. Literalmente, dormir en la oficina (en el suelo) durante meses con jornadas de 20 horas. Sé qué es arriesgarlo todo; la frustración del fracaso empresarial y también la alegría del éxito soñado, buscado, luchado, merecido y logrado. Asumo riesgos desde siempre. En todo. Mis expediciones son mi recreo y premio, pero como es lo único que trasciende a quien no quiere molestarse en informarse bien, pues efectivamente nos encontramos con sus vacuos, simplones y estériles comentarios.
Sobre lo que afirma que "me aprovecho", estamos en las mismas. Es sencillísimo soltarlo sabiendo que no voy a poder defenderme. Pero fíjese, desde 1982 que empecé a navegar he realizado 38 travesías consiguiendo 11 récords del mundo. Las hago por pasión, afición y amor al deporte y la expedición. Siempre supeditando el apoyo de los patrocinadores al éxito de mis desafíos, asumiendo yo personalmente el 100% del riesgo financiero (además del de la propia vida), siendo el único expedicionario o deportista que conozco que actúa así. Ya me dirá usted a mi dónde me aprovecho yo y en qué. 
Quizá le parezca que a nivel social el matrimonio de mi hermano menor me ha podido beneficiar. Pues mire usted, no sólo no me ha beneficiado en absolutamente nada, sino que ha supuesto una verdadera losa en mi vida. Una auténtica desgracia para mí, ya que me supuso pasar a ser "conocido" para el gran público, algo que representa un calvario para quien nada tiene que ganar en ése ámbito como es mi caso: no soy cantante o actor, ni me dedico a una profesión que necesite de la fama para triunfar. Ya me dirá para qué me sirve a mí la fama cuando intento convencer a un ruso para que compre un apartamento en Salou... Y en mi vida deportiva, sólo me sirve la fama conseguida por mí mismo en ese ámbito. Es lo único positivo para mi autoestima y para mis patrocinadores (que en todo caso apuestan a caballo ganador, con lo que no les afecta). 
A nivel de mi ámbito social o empresarial, ya era conocido (en el pequeño y limitado entorno interesante para mí) antes de ese matrimonio. Algunas veces, en los 80, la prensa económica me trataba como “joven empresario” cuando monté TeleSat u otras empresas. Jamás fui elhermano de nadie. Y en el ámbito deportivo, lo mismo. Si mira en las hemerotecas comprobará que la prensa deportiva me llamaba en 1992 "El Induráin del mar" o "El otro Induráin" por mis travesías, que inicié 14 años antes de ese matrimonio...
Socialmente y moralmente estaba en el mismo lugar donde estoy hoy. Seguro que influye la enorme suerte de haber tenido los padres que tengo y también los abuelos. El materno fue un magnífico y ejemplar Magistrado del Tribunal Supremo y el paterno, ministro de Fomento, de Guerra, Alcalde de Madrid, Académico y Diputado en tiempos de Alfonso XIII. Tengo el mismo tipo de amistades y quiero a la misma gente. También conduzco el mismo coche desde hace 25 años. Insisto, ya me dirá usted de qué me aprovecho, cuándo, cómo y de qué manera... Porque usted lo suelta y ahí queda. Fuerte desgracia...
Ahora vivo con mi mujer en Rusia porque ella no aguanta de los españoles demasiadas actitudes, insultos, envidias y mala energía como la que destila a borbotones su artículo contra mí. Algo con lo que también ha conseguido hacerle daño a ella. Yo ya estoy vacunado, llevo aguantando desde el 95. Pero ella no. Aquí sí le voy a exigir una reparación.
Vayamos al motivo de sus nervios. Ustedes, los de la casta, no están acostumbrados a que nadie se ponga en pie. Han logrado crear un pensamiento único y que nadie les tosa. Reescriben la historia y lo mismo hablan de 1.000 años de "historia propia" como esconden lo que ocurrió en la Puerta del Sol el 12 de Abril del 31 (no el 14, sino el 12). Amedrantan a quien se sale de sus líneas; su artículo hoy es viva muestra. Pero todavía hay personas dispuestas a vivir en libertad. Gracias a Dios.
Por eso, el pasado miércoles en Moscú le dije al conseller algo tan sencillo como que en mi opinión sería más bonito, justo, lógico, inteligente y rentable, promocionar Catalunya en Rusia dentro del pabellón de España. Y esto les está sacando a ustedes de quicio. ¡Pero es algo muy fácil de entender y de puro de sentido común! Por muchas razones. Entre otras, para ahorrar costes (empleados, viajes, dietas, alquileres, etc.). Ya sabe que estamos en quiebra y lo que pasa en los hospitales. Para aprovechar la "marca España" (conocida por todos los rusos).
Y como me decía un turoperador de Moscú que venía conmigo, mandar un mensaje al turista ruso de que en España está Barcelona (por ejemplo). Porque tiene que entender usted (le guste o no le guste) que al turista ruso lo que le hace ilusión es ir a España. Es lo que le apetece. La idea de viajar a España es un sueño para muchos rusos. Vivo aquí y lo sé. Es así de simple. Es lo que me comentaba, frustrado e incrédulo, el turoperador ruso. ¡Por qué renunciar a ésa realidad! 
Y por supuesto que al ruso también le hace toda la ilusión ir a Barcelona. Y a Sevilla. Y a Palma o Madrid. Y no pasa nada, porque España es de Catalunya y de los catalanes. España es propiedad de las personas que viven en Barcelona o Cadaqués. Igual que España es al mismo tiempo la propiedad de las personas que viven en La Palma, Santurce, Vigo, Granada o Formentera.
Le invitaría a que reflexione y corrija su error de hoy. Será más libre y feliz. También mejor persona. Y si además, quiere disculparse, eso la honrará. En todo caso, yo de antemano la perdono de corazón.
Se me olvidaba agradecerle el piropo de "adolescente permanente", lo único que he de puntualizar es que “no voy” de adolescente permanente como usted dice; soy un adolescente permanente. Y lo logro manteniéndome joven y con ilusión. Estoy encantado porque con 50 me echan 35. Las claves son dos y se las voy a decir: 1. No hacer nunca daño a nadie e intentar ayudar al débil siempre. 2. Estar enamorado de una persona de alma buena, inteligencia clara y mirada limpia, mi mujer Ekaterina. Y de paso, no fumar, no beber, hacer deporte, comer sano, beber mucha agua, no tomar nunca en serio a quien insulta, etc.  
Un abrazo.